Como bien sabemos, el jengibre es conocido como una de las mejores plantas medicinales, nos aporta múltiples beneficios, a mí me encanta hacer té de limón con jengibre. Su tallo es muy apreciado en la cocina por su aroma, su sabor picante y por su aporte nutricional. Podemos comprarlo en tiendas de productos naturales y en supermercados en su forma natural o en polvo, o en algunas farmacias en forma de cápsulas. Pero, ¿Conoces sus propiedades y beneficios?
El jengibre nos proporciona una variedad de propiedades nutricionales, principalmente en vitaminas y minerales. En una raíz de jengibre fresco, encontramos carbohidratos, fibra, proteína, sodio, hierro, vitamina C, potasio, vitamina B6, magnesio, fósforo y zinc. Sin embargo, dado que a menudo lo consumimos en cantidades muy pequeñas, no nos aporta cantidades significativas de calorías, carbohidratos, proteínas o fibra. Aun así, nos aporta grandes beneficios, como lo son:
Tiene potentes propiedades medicinales ya que contiene gingerol.
Contiene propiedades antiinflamatorias y antioxidantes.
Es bueno para combatir las náuseas.
Disminuye los dolores musculares y ciertas molestias.
Reduce el azúcar en la sangre.
Es un buen tratamiento para la indigestión crónica.
Reduce el colesterol.
Disminuye las posibilidades de sufrir cáncer.
Mejora las funciones cerebrales.
Combate las infecciones.
Ayudar a combatir la gripe y el resfriado común.
Puede ayudar con la pérdida de peso.
Puede reducir significativamente el dolor menstrual.
Con estos beneficios es conveniente incluir es nuestra dieta semanal un poco de jengibre. Pero seguro te estarás preguntando, ¿De qué manera puedo consumirlo? Realmente, existen diversas formas para ingerir jengibre, y todas ellas nos permiten aprovechar de sus beneficios al máximo. La parte más utilizada de esta planta son sus raíces, las cuales las podemos picar en cubitos pequeños o rallarla para condimentar nuestras comidas. Además de esto, también lo podemos consumir en forma de té o cápsulas. Como lo mencioné anteriormente el té de limón con jengibre es mi favorito, a continuación te cuento cómo lo preparo:
Es muy sencillo, simplemente coloco a hervir limones durante 15-20 minutos. Una vez obtenida el agua hervida "alimonada", la dejo reposar para que tome el sabor del limón y le agrego un pedacito de la raíz de jengibre, no me gusta colocarle mucho porque luego pica y no me gusta, así que con un trocito basta, al final me encanta endulzarlo con miel y listo, lo disfruto y me relajo, ¡Tienes que probarlo!
Comments